El día amanece en Madrid con una densa niebla, la cual nos hace pensar que el tiempo en la sierra puede ser duro. Usamos nuestros vehículos para desplazarnos al lugar de inicio, cuando sorprendentemente al paso por Torrelodones, como por arte de magia la caprichosa niebla desaparece y somos sorprendido por un maravilloso sol otoñal y unos cielos despejados, que hace que presagiar un día espectacular.
-Rober-
-Luis-
-Emilio-
-Miguel-
-Luis-
-Cepy-
-José Manuel-
-Rober-
En un paraje inconmensurable nos presentamos, con la idea de hacer una ruta con mucha intensidad, donde se pondrían a prueba las aptitudes de los aventureros.
Por valle de La Barranca disfrutamos subiendo el corto pero intenso Camino de Ortíz y pudiendo observar la inversión térmica, donde toda la zona baja tenia albergada a la dichosa niebla, con los cuerpos ya calientes y el grupo completo, pues a alguno se le pegaron la sabanas, nos decidimos a los dos primeros descenso de la jornada, El Bambi, un inicio bastante abrupto con algunos regueros peligrosos y una segunda parte bastante rápida hasta enlazar con El Miedo, donde aquí la pericia y los cinco sentidos tienen que estar activados, por el alto contenido de dificultades, curvas con escalones y con raíces, mas curvas, mas raíces, como no, más escalones y mas rocas, grandes desniveles y por supuesto mas terreno suelto con rocas.
-Rober-
Se terminan los primeros descenso y sin mucho mas preámbulo que el de quitarnos las protecciones, nos encaminamos al Calvario, siempre me he preguntado, "- ¿a quién se le ocurriría este nombre?", pregunta similar se hacen los que ascienden por primera vez el dichoso camino, - ¿por qué ese nombre?, la respuesta la tenéis allí mismo, no sin antes haber suspirado una y mil veces y ver el sin fin de alcantarillas numeradas que nos marcan el camino y donde sin duda la mas deseada es la alcantarilla 235, "el calvario" no ha terminado pero al menos se suaviza y puedes coger aliento, muy necesario para superar las últimas dificultades, como la inclinadísima rampa de las escaleras de la estación de Renfe del Puerto de Navacerrada y llegar a la fuente donde recobrar la ilusión...
... - "La ilusión de estar ahí, compartir con gente a la que quiero y alguno de los muchos que me han animado, después de seis largos meses de "cruzada", sin disfrutar de vosotros y ahora con vosotros, por donde mas nos gusta, de ese aroma, de la melodía de las aves, del susurro de los arroyos, y si también porque no decirlo, del roce del neumático con la con la tierra y la pastilla con el disco". - EmiJiSu.
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-Rober-
-Luis-
En el ventoso Puerto de Navacerrada se recupera energías en forma de barritas energéticas y agua, para afrontar el último esfuerzo por la ladera de la Bola del Mundo, hasta Peñas Cabritas donde se disfruta de las cumbres como Siete Picos, Maliciosa, valles como Navalmedio y La Barranca, hacia este último nos adentrándonos surcando por el mar de rocas del sendero de El Tubo, donde antes de llegar a la zona mas flow en el bosque, Miguel, pierde el control de su fabulosa máquina dando con sus huesos en el suelo, produciéndose un corte por encima de la ceja y que se sana para poder terminar por los senderos del bosque de La Barranca, compuesto de tres tramos flow, con horquillas de 180º, cambios de rasante, curvas contraperaltadas y mucha, mucha velocidad y diversión, sin dejar de respetar a los pocos senderistas que nos encontramos y terminando el descenso en la última presa de La Barranca.
-"Biciosos", locos aventureros-
La llegada a los coches es deseada pues uno de los aventureros, José Manuel, nos deleita con unas cervezas heladas, adelantándose a su cumpleaños el próximo viernes, pues es baja justificada para la próxima aventura.
Por prevención la aventura se termina con Miguel en el hospital para le den dos puntos de sutura y unas horas de observación.
EL PRÓXIMO DOMINGO
MAS AVENTURAS.
Domingo 10/11, 8.30h La Jarosa, en el dique del embalse.
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